martes, 5 de agosto de 2008

Desfragmentación de un disco muy duro

El pasado sábado el plenario del Partido Colorado no logró llegar al quórum de 120 convencionales para votar el desafuero del ex intendente de Artigas, Carlos Signorelli, quien está acusado de maniobras de fraude durante su administración al frente de la intendencia de ese departamento.

En un momento del plenario, se encontraban 124 convencionales listos para votar por el desafuero o no desafuero de Signorelli, pero cuando se iba a votar efectivamente se encontraban 110 convencionales, lo que imposibilitó la votación.
Esta se realizará en una semana, en el plenario de la cámara baja.

Pero el tema de fondo que trataremos no es este caso particular, sino la ruptura interna del golpeado Partido Colorado. Washington Abdala y Germán Cardozo votarán el desafuero de Signorelli, oponiéndose a lo que la mayoría del partido votará seguramente incluído el ex presidente Julio María Sanguinetti, con quien Abdala forjó su carrera política.

El tema fue sorpresivamente propuesto en el plenario por el ex senador Manuel Flores Silva, y mencionado insistentemente por varios miembros del partido que hicieron uso de la palabra en el plenario. Sanguinetti argumentó su posición sobre el tema: "nosotros no linchamos a nadie y la moción de Flores Silva no procede porque no podemos prejuzgar al no conocer en detalle de lo que se le acusa". También agregó que "hay una campaña de mala fe contra el Partido Colorado".

Después de hablar Sanguinetti, habló el convencional Amaro Cedrés, comparando al actual gobierno con la dictadura, diciendo que hay una persecución política mayor que en la dictadura, y que tal como hizo Sanguinetti en el primer gobierno post-dictadura, habrá que restituir a los preseguidos políticos de este gobierno del Frente Amplio.

Por último, habló Abdala, que fundamentó su posición para votar el desafuero de Signorelli, y mirando fíjamente a Sanguinetti dijo: "si uno se desvía de la ética, hay que marcarlo y señalarlo, las cosas hay que decirlas de frente como corresponde entre caballeros", dejando en claro un marcado distanciamiento del lider del Foro Batllista.


Como conclusión, el Partido Colorado llegó al punto en que se matan entre ellos por lo poco que les queda, en vez de buscar soluciones para salir adelante como partido. De esta manera vemos que privan los intereses personales de sus miembros por sobre los del partido, cosa que se sabía hace mucho tiempo, pero que tardamos 150 años en darnos cuenta, hasta que vino Jorge Batlle y le mostró a los incrédulos lo obvio.


¿Ahora entendieron el punto?


Saludos.
Mauricio.


Fuentes: www.larepublica.com.uy, No Toquen Nada (Océano FM)
Foto: www.google.com

1 comentario:

Chazz dijo...

Mientras los turcos asediaban Constantinopla en 1453 (capital y última ciudad que le quedaba al agonizante Imperio Bizantino), en la importante iglesia ortodoxa griega los monjes se mataban entre sí discutiendo si los ángeles tenían sexo o eran asexuados por la gracia de Dios...
La impotencia de los anacrónicos y genuflexos alcahuetes "dirigentes" adictos a Sanguinetti, es tal, que no se arregla con ninguna clase de Viagra político.
Que se hundan en el pantano que ellos crearon.

Me gustó mucho la foto de los planchas.

Beso!